Hallazgos prometen un monitoreo continuo y no invasivo de enfermedades crónicas
Un estudio pionero realizado por investigadores del sistema de salud Mount Sinai ha demostrado que los dispositivos portátiles pueden identificar, diferenciar y predecir brotes de enfermedad inflamatoria intestinal (EII), lo que representa un avance significativo en la gestión y monitoreo de esta afección.
Los hallazgos, publicados el 16 de enero en la revista Gastroenterology, sugieren que la tecnología portátil puede prever el desarrollo de brotes en pacientes con EII, permitiendo un seguimiento continuo mediante dispositivos comerciales ampliamente disponibles.
“El monitoreo actual de la enfermedad depende de la interacción directa de los pacientes con sus médicos, ya sea a través de visitas al consultorio, análisis de sangre o heces, o colonoscopias. Estos métodos son invasivos, inconvenientes y ofrecen información solo en un momento específico”, señaló el Dr. Robert Hirten, autor principal del estudio y Director Clínico del Instituto Hasso Plattner para la Salud Digital en Mount Sinai.
“Nuestro estudio demuestra que dispositivos comunes como Apple Watches, Fitbits y anillos Oura pueden ser herramientas efectivas para monitorear enfermedades crónicas como la EII de manera remota, continua e incluso en tiempo real”.
La EII, una afección crónica que causa inflamación en los intestinos, afecta a más de 2.4 millones de personas en los Estados Unidos. En el estudio, participaron más de 300 personas con colitis ulcerosa o enfermedad de Crohn, las dos formas principales de EII, provenientes de 36 estados. Los participantes usaron dispositivos portátiles, respondieron encuestas diarias sobre síntomas y proporcionaron muestras de sangre y heces para evaluar la inflamación.
Los investigadores identificaron que patrones circadianos de variabilidad de la frecuencia cardíaca, junto con la frecuencia cardíaca, niveles de oxigenación y actividad diaria, medidos por los dispositivos, cambiaban significativamente cuando había inflamación o síntomas presentes.
Además, estos marcadores fisiológicos pudieron detectar inflamación incluso en ausencia de síntomas y diferenciar si los síntomas eran causados por inflamación activa en los intestinos.
De manera destacable, las métricas de los dispositivos portátiles comenzaron a mostrar cambios hasta siete semanas antes de que los brotes se desarrollaran.
Los investigadores también están aplicando enfoques similares a otras enfermedades inflamatorias crónicas, como la artritis reumatoide, y utilizan inteligencia artificial para desarrollar algoritmos que predigan brotes de manera personalizada.
“Estos hallazgos abren la puerta para aprovechar la tecnología portátil en el monitoreo de la salud y el manejo de enfermedades de maneras innovadoras que no habíamos considerado antes”, concluyó el Dr. Hirten.
“Esperamos que, en el futuro, este enfoque mejore significativamente la calidad de vida de nuestros pacientes”.